El Papa Francisco nos pide que apoyemos la familia y pensamos que una buena forma de hacerlo que apoyar a los matrimonios.

«Queridos esposos, sepan que sus hijos los observan con atención y buscan en ustedes el testimonio de un amor fuerte y confiable.
Ustedes tienen la misión de transformar la sociedad con su presencia en el mundo del trabajo y hacer que se tengan en cuenta las necesidades de las familias.
La vocación al matrimonio es una llamada a conducir un barco incierto —pero seguro por la realidad del sacramento— en un mar a veces agitado. Cuántas veces, como los apóstoles, sienten ganas de decir o, mejor dicho, de gritar: «¡Maestro! ¿No te importa que perezcamos?» (Mc 4,38). No olvidemos que a través del sacramento del matrimonio Jesús está presente en esa barca. Él se preocupa por ustedes, permanece con ustedes.
Que san José inspire en todas las familias la valentía creativa, tan necesaria en este cambio de época que estamos viviendo, y Nuestra Señora acompañe en sus matrimonios la gestación de la “cultura del encuentro”, tan urgente para superar las adversidades y oposiciones que oscurecen nuestro tiempo. Vivan intensamente su vocación. No dejen que un semblante triste transforme sus rostros. Su cónyuge necesita de su sonrisa. Sus hijos necesitan de sus miradas que los alienten.»

Carta del Santo Padre Francisco a los matrimonios con ocasión del año “familia amoris laetitia”

El matrimonio es una realidad permanente, universal y creacional, (ya que existe un designio de Dios sobre el matrimonio, manifestado a partir de la humanidad del hombre y de la mujer y en la Revelación). Para los cristianos el matrimonio es, además, es una realidad sacramental.

En esta asignatura abordaremos el matrimonio desde una óptica teológica, en cuanto fe pensada. Las sesiones tendrán enfoques diversos pero complementarios (apologético -para ayudar a dar razones en cuestiones controvertidas-, antropológico, sacramental, biomédico, del derecho, moral y espiritual).

El objetivo es ayudarte a vivirlo vocacionalmente y capacitarte mejor para acompañar desde la amistad a los que lo necesiten.